2º PUESTO
El proyecto que
presentamos para el nuevo C.I.T. Siberia en Herrera del Duque, viene claramente
condicionado por la ubicación de la parcela, los condicionantes climáticos y el
entorno. Situada al oeste de Herrera del Duque, en la periferia urbana, la parcela
trapezoidal se ubica al borde de una calle arbolada que desemboca en la
principal vía de entrada y salida del núcleo. En ese encuentro de
comunicaciones la parcela tiene su esquina norte, junto al acceso a la
explanada del recinto ferial, que preside el edificio octogonal de Feria de
Muestras, con bastante presencia en el entorno. Nuestra propuesta opta por una
implantación sosegada, afianzando los límites de la parcela en su parte
suroeste, y liberando su mitad norte de cualquier tipo de edificación. Este
espacio libre es, a la vez, antesala del recinto ferial y del CIT y un nuevo
espacio urbano. Dicho espacio urbano, implementa el carácter eventual del de
Feria de Muestras, al ser permanente. Esta condición de uso continuado reclama
un alto grado de habitabilidad, que consideramos que otorga el tratamiento
ajardinado, conservando el arbolado existente. La gran vocación urbana y
congregacional del edificio no sólo se refleja en el exterior, sino que en el
tránsito hacia el interior del mismo hay toda una gama de matices espaciales
diferenciadores. De este modo, desde ese espacio externo se accede, como si de
una calle se tratara, por una zona pergolada (para mayor confortabilidad), una
calle interna que distribuye los diferentes accesos y permite independizar usos
en función de sus franjas horarias y tipos de “público”. Dicha “calle” conecta
con el espacio libre interno, una serie de patios que ayudan a controlar
climáticamente el edificio, al igual que dota a los espacios interiores del
mismo de un complemento que entendemos necesario, como es un entorno
controlado, apropiado, desde el mismo espacio de trabajo. Esta sucesión de
espacios libres internos se limitan por un perímetro construido, quebrado en el
interior de la parcela, que por un lado construye la zona de linderos suroeste,
y por otro, caracteriza y cobija el espacio libre exterior. En conclusión,
dicha implantación y formalización del edificio permite que ocurran diferentes
episodios (espacio antesala, espacio plaza-parque urbano, espacio calle interna
pergolada, espacio libre interno), que no hace otra cosa que significar la
importancia del carácter urbano de
la propuesta, entendiendo como tal todo aquello que da soporte al desarrollo
social.